
Petrobras recibió finalmente la autorización para iniciar la exploración petrolera cerca de la desembocadura del Amazonas, un proyecto fuertemente criticado por ambientalistas a días de que se celebre en Brasil la cumbre climática COP30. “Petrobras cumple con todos los requisitos establecidos por la agencia reguladora ambiental Ibama”, aseguró la compañía en un comunicado.
La agencia dio permiso para perforar un pozo exploratorio en aguas profundas del denominado Margen Ecuatorial, a 500 kilómetros de la desembocadura del caudaloso río Amazonas y a 175 kilómetros de la costa. Lo hizo tras un “riguroso proceso”, según Ibama.
La perforación está programada para comenzar de inmediato, con una duración estimada de cinco meses, adelantó Petrobras. La presidenta de la compañía, Magda Chambriard, dijo esperar “excelentes resultados” y “comprobar la existencia de petróleo en la parte brasileña de esta nueva frontera energética global”.
El proyecto enfrenta al gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva con defensores del medioambiente. El mandatario sostiene que la extracción de hidrocarburos es necesaria para costear el cambio hacia energías limpias.
El ministro de Energía, Alexandre Silveira, celebró la decisión de perforar en esa vasta área marítima, donde Guyana y Surinam ya han descubierto enormes reservas de petróleo. “El Margen Ecuatorial representa el futuro de nuestra soberanía energética”, escribió en X.
El camino hacia la exploración
El Ibama había negado a Petrobras una licencia de exploración en 2023, alegando que la compañía no había presentado las garantías necesarias para proteger la fauna en caso de un derrame de petróleo.
Petrobras presentó un recurso para que esta decisión fuera reconsiderada, y la presión aumentó por parte de Lula, quien declaró que Ibama era una agencia gubernamental que actuaba como si estuviera “en contra del gobierno”.
En febrero, una nota técnica de Ibama recomendaba “negar la licencia ambiental”, al subrayar el riesgo de “pérdida masiva de biodiversidad en un ecosistema marino altamente sensible”.
La aprobación de la licencia tuvo lugar después de pruebas preoperativas realizadas por Petrobras en agosto con las que buscó demostrar su capacidad de responder a un posible derrame.
Brasil es el mayor productor de petróleo de América Latina con 3,4 millones de barriles por día en 2024, aunque la mitad de su energía proviene de fuentes renovables.