La inversión espera verse incentivada con la llegada de un Plan Gas 4 que aún no se anuncia. La continuidad de la pandemia genera alarma en el sector

La producción de gas no convencional acentúa su caída y en julio se redujo un 12,5% en el interanual y el sector aún no encuentra indicios de reactivación. En mayo pasado, según el Instituto Mosconi, la producción de gas no convencional se había reducido en un 7,2%, cifra que dos meses después escala a casi el doble.
De este modo, la tendencia en alza de la producción del gas no convencional, que tiempo atrás llegó a registrar crecimientos interanuales de hasta tres dígitos, se revierte y confirma un presente que se hace cuesta arriba. El mapa se agrava al observar que el gas no convencional ya alcanza un 43% de todo el gas producido en el país.
“Al no poder exportar de manera significativa, todo lo que produzcas va a estar atado a la demanda. Al tener expectativas de demanda en caída, como el gas no se puede almacenar a gran escala, tenés una caída en la producción en prácticamente todos los yacimientos”, explica Julián Rojo, licenciado en Economía y referente del Instituto Mosconi.
A la espera de un acuerdo para lanzamiento del Plan Gas 4, que buscará incentivar la producción con un precio que se estima que será de USD 3,5 por MMBTu, la baja en la producción se hace cada vez más notoria, al igual que la necesidad de un espaldarazo en pos de una recuperación más temprana.
En una recta final que estira el inicio del programa de incentivo a la inversión, las compañías productoras de gas consideran en que es fundamental tener precisiones en torno a cómo se regulará el acceso a transporte en época invernal y así se lo exigen al Gobierno.
Por otra parte, y en contraposición con la actividad gasífera, según este informe, la producción de petróleo no convencional –que representa un 23% del total– se incrementó 29,2% en el interanual. Aunque si sumamos en la ecuación al petróleo convencional, la producción total en julio se redujo un 7% en comparación el mismo mes del año 2019.
Por otra parte, la demanda de gas natural en los tres meses con un ASPO más estricto (abril, mayo y junio) la demanda promedio de gas natural cayó 6,8% en comparación con el mismo período del año pasado.
Escéptico respecto a una reactivación en el corto plazo, el miembro del Instituto Mosconi entiende que “la producción sin demanda no tiene sentido. Si vos hoy querés abrir los pozos, no tenés a quién vendérselo”.
A su vez, voces del sector se anticipan a una problemática en la producción a la que se le suma el fenómeno de la estacionalidad, ya que en verano se consume la mitad del gas que en invierno.