Deberá diseñar un esquema de actualización antes de que venza el congelamiento a fin de año.
El presidente Alberto Fernández se reunió con los interventores del Enre y del Enargas para analizar una situación tarifaria que cada mes agudiza aún más el preocupante desequilibrio fiscal del país.
“Hoy me reuní con los interventores del ENRE y del ENARGAS. Analizamos la situación de las tarifas. Observamos con preocupación errores en la facturación del servicio en perjuicio de algunos usuarios. No son casos generalizados, pero debemos preservar los derechos del usuario”, destacó el mandatario.
Más allá de lo comunicado oficialmente, está claro que el encuentro con Federico Bernal y Federico Basualdo tiene como trasfondo la definición de un esquema de actualización tarifaria que está pendiente desde el inicio del mandato de Fernández.
En un primer momento se dijo que la revisión tendría lugar en el mes de junio, pero la pandemia alargó los plazos y mantuvo el congelamiento, más allá de incrementos nominales producto del cambio de los hábitos de consumo en cuarentena.
Como explicó EOL, eso trajo aparejado un fuerte aumento de los subsidios a Cammesa, que ya acumulan más de 3.000 millones de dólares en los primeros siete meses del año.
No es casualidad que la reunión se haya coordinado el día anterior a la llegada de la misión del FMI al país, institución que históricamente se mostró contraria a los subsidios energéticos. De hecho, durante el gobierno de Macri fueron responsables del ajuste en la Resolución 46, un plan de estímulos a la producción de gas muy similar al que se está por anunciar que difícilmente sea del agrado del Fondo.
En tanto, en la primera reunión del gobierno de Fernández con el FMI, el organismo mostró su preocupación por el congelamiento mencionado, algo que reconoció el propio ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
El problema es que un aumento de tarifas para ordenar las cuentas fiscales puede implicar un fuerte coletazo inflacionario y un duro golpe en los bolsillos de la ciudadanía en el medio de una crisis económica que trajo un agravamiento récord de los indicadores sociales.