Inicio Empresas Balance con luces y sombras: YPF casi duplicó sus ingresos, pero sufrió...

Balance con luces y sombras: YPF casi duplicó sus ingresos, pero sufrió un fuerte aumento impositivo

La suba en la tasa de ganancias retroactiva a principios de año elevó sus pérdidas a USD 492 millones. Sin ese efecto estacional, hubiera incrementado su utilidad en un 140%.
YPF

En un balance algo agridulce, YPF confirmó su notable mejora en términos de producción, pero no logró el cierre deseado por el tremendo impacto de la suba del impuesto a las ganancias, lo que elevó sus pérdidas a 492 millones de dólares en el segundo trimestre.

“El elevado cargo tributario durante el trimestre se debió principalmente a un cargo extraordinario por impuesto diferido dada la sanción de la Ley 27.630, que cambió la tasa del impuesto corporativo desde 25% a 35% para 2021 en adelante. Cabe mencionar que esto es un ajuste contable y no implica una salida de efectivo para la empresa”, destacaron desde la petrolera.

[La producción del shale gas de YPF pegó un salto del 126% en el primer semestre]

Antes del cobro de impuestos, el resultado operativo de la compañía daba una ganancia de 209 millones de dólares, es decir, un 140% más que en el trimestre anterior y a una distancia abismal de los 1.271 millones de pérdida registrados durante el mismo período del 2020, cuando la pandemia provocó un colapso de la demanda.

Ese gran resultado parcial se generó a raíz de una suba de los ingresos del 78% a nivel interanual surgida tanto de la recomposición productiva como de los precios recibidos. En términos de volúmenes, la producción se expandió un 5,5% frente al primer trimestre y se contrajo un 1,2% frente al mismo lapso del 2020.

El desagregado muestra los carriles inversos que transitan los pozos maduros convencionales y el shale. Mientras que los primeros cayeron un 2,4% de forma interanual en la ventana de petróleo, el no convencional saltó un 38,9%. En el caso del gas, el convencional bajó un 5,4% y el shale subió un 9,4%, números más acotados que fueron atribuidos “al bloqueo de 20 días llevado a cabo por los trabajadores de la salud en la provincia de Neuquén que afectó severamente nuestras operaciones”.

La mejora fue mucho mayor respecto a los golpeados precios del inicio de la pandemia. En ese sentido, los precios recibidos por YPF subieron un 78% en crudo y 54% en gas, traccionados por el plan de estímulos del gobierno. De todos modos, el rango de comercialización promedio los 51,6 dólares el barril, unos 17 dólares menos que la cotización del Brent debido al esquema de transición entre las refinerías y los productores locales que establece un barril criollo más bajo.

[YPF se recuperó en el último trimestre, pero cerró el 2020 con una pérdida de USD 1.000 millones]

Ya en el Downstream, se observó un aumento del 20% en las ventas de gasoil por el dinamismo agropecuario y una baja del 16,8% en la demanda de naftas contra el trimestre anterior por las mayores restricciones a la movilidad durante abril, mayo y junio.

Estos factores arrojaron un resultado operativo de 310 millones de dólares, que primero fue reducido a 209 millones por las pérdidas financieras y finalmente derivó en una utilidad neta negativa en 492 millones por el cobro de 701 millones en impuestos.

De esta manera, el rojo semestral prácticamente se equipara al del 2020, pero en la comparación trimestral interanual se observa una mejora del 60,9%. La expectativa de la empresa es que, superado el efecto impositivo estacional, en la segunda parte del año se intensifique el sendero alcista en la producción y se logre una considerable ganancia que empiece a dejar atrás el lastre del coronavirus.