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Cómo seguirá el mercado de gas mundial después de la guerra en Ucrania

La invasión rusa elevó varios escalones la tensión en un sector energético, que ya tenía una agenda desafiante en materia de oferta y demanda para 2022
Telam.

Desde fines de 2021 pero mucho más en las últimas semanas, el abastecimiento de energía en los volúmenes y plazos requeridos se transformó en el factor determinante a monitorear este año, que arrancó atravesado por la crisis en Ucrania.

Las proyecciones de los analistas delinean una demanda creciente en relación a 2021, descontando la fuerte suba de los precios del gas y el gas natural licuado (GNL), lo cual es una buena noticia para la industria y los países productores.

Sin embargo, el panorama está lejos de ser una panacea. En el mapa de oportunidades y desafíos aparecen la demanda de GNL de China, la siempre consistente demanda europea de gas natural ruso, y hasta la transitabilidad del Canal de Suez para los buques que transportan GNL desde y hacia el Mar Mediterráneo.

Bloomberg NEF, una división especializada en energía de la mayor agencia de noticias económicas del mundo, elaboró un decálogo de predicciones sobre lo que puede ocurrir este año en el mercado del gas natural y el GNL.

De allí surge que se espera una demanda global de GNL que alcance los 400 millones de toneladas métricas en 2022, un 6,6% más que en 2021.

Esa mayor demanda vendrá de China, en un contexto de mayor crecimiento de la economía este año y una transición del carbón al gas natural, pero también aumentará la demanda de GNL de India, Pakistán, Bangladesh y Tailandia. En el caso de China dispone de una mayor capacidad de importación de GNL, aunque eso no se traduce por ahora en más contratos de largo plazo.

“En 2022 se espera que se pongan en marcha 9 nuevas terminales y 4 proyectos de expansión de capacidad de terminales existentes, con una capacidad de recepción adicional total de 38,9 millones de toneladas métricas al año”, señala el análisis de Bloomberg NEF.

El “factor Putin”

Pero sin dudas, el mayor desafío que debe enfrentar el mercado gasífero mundial es la provisión de gas natural ruso a Europa, que involucra la certificación y entrada en operaciones del gasoducto Nord Stream 2 desde Rusia a Alemania por el Mar Báltico. Es un proyecto que hoy está frenado por la invasión rusa a Ucrania y las sanciones a Moscú.

Partiendo de la base que el balance gasífero europeo “seguirá siendo inusualmente ajustado” en 2022, el informe destaca: “El suministro reducido, los precios récord del gas, la volatilidad sin precedentes y las tensiones geopolíticas que hicieron de 2021 un año tan tumultuoso para el mercado europeo del gas muestran pocas señales de disminuir en 2022”.

En cuanto a los flujos de gas ruso, afirma que su reducción a Europa fue un factor clave para los precios récord del año pasado. Y destaca que la baja de los volúmenes hacia el continente, ya sea por decisión de Moscú o por las sanciones debido a la intervención rusa en Ucrania “será abrumadoramente el riesgo clave para el balance de gas europeo en 2022”.

Pero aquí aparecen otras luces amarillas. Europa terminará el invierno con bajo nivel de almacenamiento pero además la robusta demanda de GNL en China y otros países asiáticos puedan dejar a Europa con menores volúmenes, gatillando una nueva ola alcista de los precios internacionales.

En este contexto, Bloomberg NEF sostiene que las importaciones de gas de Europa desde Rusia cayeron en 2021 a 91.400 millones de m3. Esto supone unos 3300 millones menos que el año anterior y “más de 20.000 millones de m3 por debajo de los máximos de 2018/19”.

Pese a los precios récord, el gigante gasífero ruso Gazprom no hizo ventas a través de su Plataforma de Venta Electrónica, como sí realizó en años anteriores, lo que mantiene baja la oferta a Europa. En cuanto al Nord Stream 2, todo indica que no enviará fluido al menos durante el primer semestre de 2022.

Estados Unidos también juega

Una opción para suplir el gas ruso a Europa es una mayor oferta de Estados Unidos. Pero en el balance global empiezan a tallar la capacidad de transporte, el costo de los fletes –más caros en el Atlántico que en el Pacífico-, así como los tiempos y la logística para pasar por el Canal de Suez.

En 2021 el GNL de EE.UU. rumbo a Japón, Corea, China y Taiwán, llegó a través del Canal de Panamá, pero en momentos de sobredemanda de esa vía terminó utilizando Suez (91 buques tanque de EE.UU en 2021), desde el Mediterráneo hacia el Mar Rojo, el Índico y Lejano Oriente. Estos buques se suman a los envíos de GNL desde Qatar a Europa en sentido inverso.

“Si se requieren más barcos este año para transportar las entregas de GNL desde la costa del Golfo de Estados Unidos a Europa, menos barcos estarán amarrados en los viajes más largos de EE.UU. a Asia a través de los canales”, concluye Bloomberg NEF.