La mayor caída en términos reales se dio en las transferencias a Cammesa con una reducción del 50%. La quita de subsidios al nivel 1 hizo que la cobertura tarifaria alcance el 70% de los costos de generación.
El efecto de la segmentación tarifaria ya empieza a notarse en las arcas del Estado. Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política de la UBA, los subsidios energéticos cayeron un 28,2% en términos reales durante el primer bimestre del año.
El mayor recorte se observó en las transferencias a Cammesa que tuvieron una reducción del 50%, mientras que los pagos a Enarsa subieron un 213,5% y las erogaciones por el Plan Gas saltaron un 118%.
“La compañía que administra el mercado eléctrico devengó cero pesos en enero, mientras que en igual periodo del año anterior tuvo devengamiento positivo. Sin embargo, esta situación encuentra explicación estacional (en enero hay bajos pagos comprometidos respecto al resto del año) a diferencia del mes de julio como es el caso que se presenta más adelante”, explica el documento.
“Una estimación lineal permite inferir que en julio de 2022 no se devengaron unos $201.075 millones a moneda constante de febrero de 2023, que podrían estar incrementando deudas al interior de la cadena de valor del sector eléctrico”, agregan.
De este modo, la quita de subsidios eléctricos provocó que, en el segmento de altos ingresos, la tarifa pase a cubrir el 71% de los costos de generación. En tanto, en los otros dos niveles apenas alcanzan el 23% y 28%, respectivamente.
Es por eso que, mientras la factura eléctrica promedio para un usuario del AMBA de estos dos niveles representa tan sólo el 1% de un salario promedio, en el nivel 1 se disparó al 1,8% en pocos meses.
Tal como detalló EOL, la indicación del FMI es acelerar la segmentación tarifaria para quitar ese 29% restante de subsidios en las tarifas de usuarios del nivel 1 y dar por terminada la inscripción al RASE para que todos aquellos que no se anotaron pasen a pagar tarifa plena.
Por otro lado, los subsidios al servicio público del agua en el AMBA (AYSA) tuvieron una reducción del 36,3% interanual y el transporte vio un incremento en términos reales del 19,5%. No obstante, el rubro energético ocupa el 69% de los subsidios seleccionados y permite que el resultado final sea positivo para las arcas del Tesoro.