Así lo confirmó su presidente Pablo González. Con este aporte y los fondos del presupuesto, se podría financiar el primer tramo hasta Salliqueló.
El presidente de YPF confirmó que invertirán los 500 millones de dólares recaudados gracias al impuesto extraordinario a las grandes fortunas en el nuevo gasoducto que unirá Vaca Muerta con Santa Fe.
“El aporte extraordinario, que se votó en el Congreso el año pasado, y que se había pensado para que el 25%, unos 500 millones de dólares, vaya para producir se va a tomar la decisión de invertirlo en el gasoducto”, informó en una entrevista con Crónica TV.
El caño es clave para superar el actual cuello de botella en el transporte gasífero, donde la capacidad de evacuación de Vaca Muerta está saturada y eso le pone un techo al crecimiento de la formación no convencional.
Habiendo tomado nota de la urgencia de empezar esta obra lo antes posible, el gobierno anunció hace unos meses una readecuación presupuestaria que asignaba cierto financiamiento, aunque escaso.
Ahora, dado que la idea de un crédito chino todavía no prospera, se decidió que YPF aporte esa suma a la causa -que originalmente se había pensado para el upstream-, y así dejar de demorar el inicio de la obra.
Los fondos, sumados al aporte presupuestario equivalentes a otros 500 millones de dólares, servirían concretar el primer tramo desde Tratayén a Salliqueló, un nodo cercano a Bahía Blanca que unirá este caño con otros gasoductos existentes como el Neuba I y II.
Ya en una segunda etapa, se buscará ampliar el ducto hasta San Jerónimo, provincia de Santa Fe, “con posibilidades de exportar gas a Brasil”, según destacó González, aunque para eso será necesario otra obra de conexión con el país vecino.
“Tenemos la segunda reserva de gas no convencional del mundo y la cuarta de petróleo. Lo que nos falta es capacidad de transporte. Hay una gran potencialidad de la Argentina en materia de producción de gas”, agregó el titular de la petrolera de bandera.
