EOL habló con un empresario clave que está detrás de las negociaciones para lograr el consenso del sector. Los principales puntos de la futura ley.
A menos de dos meses del vencimiento del régimen de promoción de los biocombustibles, Máximo Kirchner negocia contrarreloj para presentar un nuevo proyecto que tenga el consenso suficiente de los empresarios y el resto del arco político para poder ser aprobado en tiempo récord.
En un principio, el sector se manifestó en contra del debate y pidió la prórroga de la actual normativa ante el temor de los impredecibles tiempos legislativos. Pero ante el compromiso del oficialismo, un grupo de productores salió a apoyar la iniciativa y empezó a buscar el acompañamiento de las pymes.
“La prórroga es patear la pelota. Una nueva ley sería una solución de largo plazo que daría previsibilidad para dejar de poner parches. Yo creo que el proyecto es muy bueno y hay consenso de parte de las plantas. Espero que políticamente todos los partidos se pongan de acuerdo para que salga antes de mayo”, afirmó a este medio Juan Carlos Bojanich, dueño del Grupo Bahía Energía y uno de los empresarios más influyentes del sector.
Según pudo saber EOL, el proyecto está prácticamente terminado y se presentaría la próxima semana en la Cámara de Diputados. Entre sus aspectos más importantes, se destaca un cupo exclusivo para las pymes para resguardarlas del lobby de las grandes aceiteras y petroleras, dispuestas a conquistar porción de mercado.
“La característica principal es que nos darían un cupo de hasta 50 mil toneladas. Tendrían que ser plantas alejadas de la zona núcleo para fomentar las economías del interior profundo y como contraprestación nosotros nos comprometemos a seguir reinvirtiendo”, detalló Bojanich.
En cuanto a los cortes, habría una reducción en relación al 10% y 12% reglamentado actualmente para el biodiésel y el bioetanol que todavía está sujeto a negociaciones con los diferentes actores.
“El corte va a sincerar lo que hoy se está cortando y produciendo realmente, pero el 100% de las pymes van a tener un cupo especial que las petroleras van a tener que refinar. De las 55 plantas de biocombustibles que están en el país, el 90% quedarán protegidas. Se garantiza corte, precio y el compromiso de las pymes de reinvertir en valor agregado para mejorar la balanza comercial”, indicó a EOL uno de los diputados nacionales que está participando de la redacción.
“La ley del 2006 fue muy buena, pero ahora se necesita un nuevo horizonte. Una nueva ley lo que favorece es dejar atrás los procesos de judicialización y construye certezas a largo plazo para cuidar a las pymes y avanzar en el camino de la industrialización de la ruralidad”, agregó.
