Inicio Actualidad “Con el Plan Gas frenamos el declino, ahora hay que pensar en...

“Con el Plan Gas frenamos el declino, ahora hay que pensar en exportar”

En una entrevista con EOL, Darío Martínez cuenta los próximos pasos para Vaca Muerta y habla de los planes de la Secretaría de Energía para 2021.

A pesar de que aún no se inauguró el nuevo asiento de la secretaría de Energía nacional en la ciudad de Neuquén, Darío Martínez ya comenzó a ejercer funciones desde la capital del principal distrito hidrocarburífero del país.

“Estoy haciendo martes, miércoles y jueves en Buenos Aires y viernes, sábado y lunes en las provincias productoras”, cuenta antes de comenzar la entrevista con EOL desde sus provisorias oficinas cercanas a la Universidad del Comahue y revela que él mismo se está encargando de analizar las distintas propiedades que tiene el Estado por la zona.

Es que más allá de la simbología de “federalizar la toma de decisiones”, esta nueva sede y la propia elección del ex legislador patagónico como secretario hablan de una apuesta por Vaca Muerta como no se ve en ningún otro sector económico.

Tras un 2020 con gestos importantes en plena pandemia como el Barril Criollo, la baja de retenciones y el Plan Gas, ahora el Gobierno se prepara para rediseñar el esquema tarifario y discutir una ley que promocione las exportaciones de crudo y ayude a equilibrar las cuentas externas.

[¿Cómo salió la licitación del Plan Gas 4?]

¿Qué análisis hace de las ofertas que se presentaron en el Plan Gas?

Estamos más que contentos, participaron todos los jugadores de la industria y pudimos cubrir casi el 100% del bloque de 70 millones de metros cúbicos que nos habíamos planteado para frenar el declino y sustituir ese gas que se importaba por gas argentino, producido por trabajadores y pymes argentinas. Es un esquema que nadie creía que íbamos a llegar a hacer antes de fin de año. Dicho esto, también hay que decir que sobre todo en Vaca Muerta hay una oportunidad de ir por más, no solo frenar el declino. Sustituir definitivamente las importaciones y pensar en exportar. Pero eso necesita otro análisis y otro esquema con inversiones importantes para poder evacuar ese gas.

DE NO HACER EL PLAN GAS, NOS LLEVABA A UNA NECESIDAD DE EXTRAER DIVISAS POR USD 9.200 MILLONES. AHORA YA ESTAMOS TRABAJANDO EN UN ESQUEMA PARA EXPORTAR

¿Cuándo se llevaría a cabo ese nuevo esquema?

Nosotros ya estamos trabajando. Es muy positivo resolver ese objetivo urgente que teníamos de frenar el declino. De no hacerlo nos llevaba a una necesidad de extraer divisas de 9.200 millones de dólares. Ahora también estamos analizando un esquema de ir por más.

¿Se trataría de un esquema de licitaciones al igual que el Plan Gas?

No, es un esquema más a mediano plazo. Lo primero que mandé a analizar es la industria brasilera y la industria chilena. El martes pasado también hablé con el ministro uruguayo y ya había hablado con los ministros de Brasil y Chile para ver qué podemos colocar rápidamente con pequeñas obras y no solo llevar gas afuera sino al resto del país al aprovechar esa traza que se va a hacer. Nos falta Paraguay y Bolivia. Esa inversión cierra en un esquema donde nos compren gas a un plazo de años interesante.

¿El acuerdo con Bolivia sería en paralelo a la negociación por la nueva adenda del contrato de gas?

Ayer hablé con el ministro de energía de Bolivia sobre la posibilidad de resolver la adenda antes del 31 de diciembre. Eso nos va a marcar cuánto gas vamos a tener en invierno y, en función de eso, vamos a ver cómo cubrimos los picos de consumo. Pero también le propuse la posibilidad de venderles combustibles, diésel, nafta y petróleo.

¿Qué capacidad instalada hay en los gasoductos hacia algunos de los mercados regionales que mencionó?

La capacidad de gasoductos la topeamos con el Plan Gas. Sí tenemos la posibilidad de evacuar gas a Chile. Hay que ver la posibilidad de exportar dependiendo de los precios que tengamos. En el caso de Paraguay hay que hacer algunas obras. En el caso de Uruguay vamos a analizarlo ahora con el ministro. Y en el caso de Bolivia para exportarle crudo también tenemos que hacer unas pequeñas obras. En el caso de Brasil ya lleva una inversión mucho más grande, pero el mercado brasilero también es un mercado mucho mayor.

[El plan de Brasil para potenciar el Presal y gasificar su matriz energética]

¿No hay un riesgo de que una obra semejante nos condicione a tener un único comprador? Sobre todo, teniendo en cuenta las perspectivas de desarrollo del Presal a futuro.

Si nos van a comprar gas a 10 o 15 años a un precio relativo que estamos analizando, no es un problema. Porque es una industria que puede demandar ese gas.  Lo primero que tenemos que hacer es un análisis de la industria brasilera. El declino que tiene Bolivia es una oportunidad para nosotros. Puede ser un problema ahora en el invierno por si no nos dan el volumen que necesitamos, pero a mediano plazo es una gran posibilidad para que Argentina coloque gas. Pero la primera discusión y lo primero que tenemos que tener claro es por cuántos años y a qué precio nos van a comprar.

¿Descarta el proyecto de exportar GNL a gran escala?

Yo no descarto nada, pero los precios hoy son otros.

¿Qué piensa que sucedió con el cupo de invierno que no tuvo el mismo volumen? ¿Se está pensando en un nuevo esquema para ese período?

El Plan Gas plantea licitaciones adicionales, pero primero tenemos que resolver qué volumen vamos a tener de Bolivia y resolver esa adenda, luego ver qué posibilidades tenemos a un precio menor y recién ahí ver si hace falta una nueva licitación.

¿La idea con Bolivia es profundizar el esquema de diferenciación de lo que entregan en invierno y verano?

Si, eso es lo mejor para la Argentina, nosotros tenemos que asegurar un buen volumen en invierno. Hay que ver las limitaciones y cómo está Bolivia. Acaban de cambiar autoridades y ese proceso les esta llevando un tiempo, pero ya tuvimos dos conversaciones con el ministro y el martes vamos a volver a estar comunicados, así que estamos trabajando bien. La idea es tenerlo en diciembre, pero ellos nos están pidiendo un poco más de plazo.

Hablamos de posibles mercados regionales para el gas, pero hay otros mercados domésticos como es el caso del transporte. ¿La secretaría está trabajando con otros ministerios para profundizar el uso del gas en el transporte?

Lo primero que hice cuando asumí fue ponerme en contacto con el ministro de Transporte y ver qué análisis estaban haciendo. Ellos están planteando un esquema de ir al gas, con lo cual nosotros hemos puesto a un equipo a disposición. Estamos también analizando un esquema para reconvertir barcos a gas, tenemos varias cuestiones en carpeta.

EL ALMACENAMIENTO DE GAS ES ALGO QUE NO ESTÁ LEGISLADO Y REPRESENTA UNA GRAN OPORTUNIDAD

¿Es prioritario para esta secretaría avanzar en la industrialización del gas en petroquímica?

Es un objetivo permanente. Si bien tenemos el objetivo de avanzar con el Plan Gas para tener más producción, sería muy bueno si le agregamos un proceso y lo que exportamos es valor agregado nacional. Lo mismo para el petróleo, vos fíjate que en la charla con el ministro de Bolivia yo le estoy planteando eso. Pero en el caso del gas, primero necesitamos tener el volumen suficiente. Hay un potencial en gas bajo tierra que hay que sacarlo y luego incorporar valor agregado, pero es un tema que lo tenemos como objetivo y es la línea que nos ha dado el presidente.

Para todos estos mercados se necesita un sistema de gasoductos ampliado. ¿El proyecto a Brasil va a determinar la nueva traza de evacuación o habrá otras obras?

Las dos cosas. Estamos pensando en un loop y algunas inversiones como máximo de 600 millones de dólares porque fue el límite que tenía el presupuesto 2021 cuando asumimos. Esas obras chicas que te mencioné pueden ayudar a aumentar entre 10 y 12 millones de metros cúbicos adicionales. Además, estamos pensando en la posibilidad de los nuevos gasoductos y un esquema de almacenamiento de gas que es algo que no está legislado, pero es una gran posibilidad.

¿Están trabajando en una ley para impulsar el almacenamiento?

Se tienen que establecer reglas claras, después vemos si es necesario una ley o no. Por ejemplo, acá hay un tema con el gas que es producido en Neuquén y almacenado en Río Negro. Hay una zona gris que hay que aclararla. Esas cosas tienen que estar muy claras para todos para avanzar en su desarrollo. Yo creo que el Estado tiene que dar previsibilidad y reglas claras. Luego me parece que hay potencialidad. En Estados Unidos se ha hecho mucho y en Argentina es muy incipiente, pero casi toda la industria nos plantea que tienen algo en carpeta. Y eso nos ayudaría mucho sobre todo para el invierno.

[Almacenamiento subterráneo de gas: la llave para sostener la producción y reducir los precios]

¿El Estado debería participar en las obras?

No, la misma industria tiene proyectado cómo hacerlo. Lo que sí tenes que tener claro es que estas zonas grises dejen de serlo, el esquema impositivo, si hay algún canon o no.

Pasemos a petróleo, hay un consenso de que es la ventana de mayor potencial exportador. ¿Qué hace falta para que se materialice?

Alberto en marzo habló de esto cuando planteó una ley de promoción. Yo creo que en este momento hay condiciones de precio y en cuanto a las retenciones que generan esa posibilidad. Lo que necesitamos es el compromiso de la industria, qué volumen se animan con reglas claras y armar un esquema para que no nos afecte el mercado interno. Pero si se anima la industria, nosotros vamos a dar los pasos necesarios para generar esas reglas y condiciones. El presidente está dispuesto a lanzar una ley de promoción, pero la industria tiene que responder qué capacidad de producción y de exportación está en condiciones de avanzar.

¿Se respetaría un cupo de exportación en firme?

Primero hay que resolver que no se beneficien pocos jugadores, sino que toda la industria sea parte de eso y que sean responsables con el mercado interno. Pero creo que ese es un acuerdo menor, no debería haber inconvenientes. Resuelto eso, habría que ver qué volumen de inversión real pueden enterrar para meterlo en producción. Y en función de eso, avanzar en los esquemas que están pidiendo.

¿No hay un dilema en el gobierno entre exportar energía o abastecer a la industria local? Por ejemplo, algunos miembros del espacio dicen que exportar a gran escala podría igualar los precios domésticos a los internacionales, lo que quitaría competitividad a la industria nacional.

Argentina no se va a salvar con Vaca Muerta o con la industria hidrocarburífera. A la Argentina le va a ir bien si tiene una industria nacional que crece, que genera empleo, con pymes que acompañan y con trabajadores con un poder adquisitivo que muevan la economía. Ahí esta la salida y para eso hace falta energía. Ahora, las reservas que tenemos están para darle energía a la industria y también para exportar, no es uno u otro. Por eso yo te planteaba que hay que acordar un esquema donde no nos afecte al mercado interno de manera negativa. Ellos lo miran desde un esquema de rentabilidad, pero nuestras decisiones tienen que buscar un punto de equilibrio donde esos beneficios que buscar ellos se logren sin generar un perjuicio a la sociedad, sino generando un beneficio.

SEGURAMENTE EN MARZO TENDREMOS AUDIENCIAS PÚBLICAS PARA AVANZAR EN LA ACTUALIZACIÓN DE TARIFAS

Finalmente le quería consultar por la actualización de las tarifas que es una de las cosas que más les preocupa a los argentinos. Había mencionado un esquema de transición, ¿podría ampliar cómo se llevará a cabo?

Hoy tenemos una RTI dolarizada que es impracticable para la Argentina. Con lo cual ir a ese esquema hoy no lo podría afrontar la sociedad. Ni el sector residencial, ni el comercial, ni la industria. Tenemos que ir hacia un esquema de transición y un uso más eficiente de los subsidios. La pandemia nos ha dado herramientas para detectar a los sectores más vulnerables de la población. En cualquier concepto, nosotros no querremos que la gente tenga que dejar de comprar otros bienes y servicios para pagar la energía y que no nos genere recesión. Ese es un objetivo que lo vamos a ir enriqueciendo a medida que tengamos más herramientas y más tecnología para hacer una utilización mucho mas individualizada del subsidio.

¿Se pueden saber cuáles van a ser las variables para hacer esta distinción? El macrismo había tomado parámetros muy cuestionados, pero al gobierno de Cristina Kirchner también le costó individualizar a los sectores más necesitados en subsidios energéticos.

Vos pensá que en ese momento no teníamos la información y la tecnología que tenemos ahora ni las herramientas. Yo creo que hay muchos más elementos. Eso es un proceso que hay que ir mejorándolo continuamente.

¿Una posibilidad de referencia podría ser el IFE?

Vos tenés individualizado en el IFE a un montón de gente que está en una situación vulnerable. El IFE no va a seguir, la información queda. Con la jubilación mínima tenés otro parámetro. Tenemos muchos elementos en ese sector. Donde estamos más limitados es en el otro sector, el que tiene que ir acercándose a pagar el verdadero costo de la energía. En el medio tenemos un montón de argentinos donde queremos que no genere recesión en la actividad. Ya lo estamos elaborando y seguramente en marzo tendremos las audiencias publicas para avanzar en eso.