El presidente trasandino le dio prioridad a la cuestión energética en su viaje a la Argentina. Los principales puntos tratados en la reunión del ministro de Energía Claudio Huepe Minoletti con Martín Guzmán.
La discusión sobre la integración energética entre Argentina y Chile estuvo en el centro de la agenda de la visita del nuevo presidente Gabriel Boric al país. “De hecho, por eso vinimos con nuestro ministro de Energía”, reconoció el mandatario trasandino en una de sus primeras declaraciones en tierra local.
Boric subrayó el interés chileno por avanzar en “intercambios en materia energética” y en “colaboraciones recíprocas”, que se vinculan con la posibilidad de acordar un swap para que Chile ceda parte del GNL que importará este invierno a cambio de una compensación futura. Algo vital para la Argentina si quiere evitar una crisis energética de gran magnitud en los próximos meses.
[¿Cómo es el modelo energético que propone Boric, el nuevo presidente de Chile?]
Sin embargo, el joven presidente delegó en su ministro Claudio Huepe Minoletti el comando de las negociaciones y no participó de ninguna de las reuniones sobre el tema junto a Martín Guzmán y Darío Martínez.
En el Palacio de Hacienda, suscribieron una Declaración Ministerial conjunta que tuvo como capítulo especial la comercialización de gas natural a futuro, dado que el nuevo gobierno chileno manifestó su intención de acelerar el proceso de descarbonización y consideran que el gas es un elemento central para lograr este cometido como combustible de transición.
“Argentina ratifica su política de desarrollo de la producción de gas natural, de consolidación de su política de exportaciones en firme a Chile y de potenciar el gas natural como combustible por excelencia de la transición energética, para disminuir las emisiones de carbono. Continuaremos con la política de exportaciones contenida en el Plan Gas.Ar, dando previsibilidad y confiabilidad, tanto a los productores argentinos, como para los compradores chilenos”, dijo Martínez.
[El plan de Chile para convertirse en una potencia del hidrógeno verde en 2030]
Otra de las discusiones relevantes giró en torno a la rehabilitación del oleoducto Neuquén Bíobío para poder abastecer a las refinerías chilenas y, a su vez, exportar excedentes por los puertos del Pacífico, un negocio que Argentina mira con mucho interés y por eso ya ha comenzado con las obras pertinentes.
En ese sentido, el encuentro tuvo la presencia de petroleras argentinas y chilenas como YPF, Enap, AGN, CGC, Tecpetrol, Pampa, PAE, Vista, Total, Shell, Pluspetrol y Wintershall.
“Estamos muy contentos de poder firmar esta declaración porque es una manifestación concreta de cómo vamos a ir avanzando en este esfuerzo de integración entre los dos países en materia energética”, afirmó el titular de la cartera energética chilena, que además indicó el interés de su país en lograr acuerdos de desarrollo conjunto en materia de hidrógeno.
