Tres petroleras ofertaron 3,25 millones de m3 día, un volumen que trae cierto alivio para el próximo invierno, pero queda lejos de solucionar las necesidades de importación. La cuenca Austral, otra vez sin interesados.
La tercera ronda del Plan Gas recibió ofertas por 3,25 millones de m3 día, un volumen considerable que ayuda a reducir las importaciones del próximo invierno, pero que apenas cubre poco más de la mitad del objetivo planteado por el gobierno (5,5 millones m3/d).
Como explicó EOL, la idea oficial era conseguir el pequeño porcentaje de gas que faltaba para topear definitivamente la capacidad de transporte desde Vaca Muerta y ver si se podía incorporar nuevas ofertas desde otras cuencas que gozan de mayor disponibilidad en sus gasoductos.
En ese sentido, podría decirse que el primer punto fue cumplido con éxito, mientras que el segundo redundó en un completo fracaso. Las únicas tres petroleras que participaron ofertaron gas de la Cuenca Neuquina incluso por un volumen superior a la capacidad ofrecida (3 millones m3/d).
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La que apostó más fuerte por esta ronda y al precio más competitivo fue Pampa Energía, la firma de Marcelo Mindlin, que ofertó 2 millones de m3/d a 3,35 dólares el millón de BTU. En segundo lugar, se ubicó Tecpetrol con 0,95 millones m3/d a 3,62 dólares y finalmente Pluspetrol con 0,3 millones de m3/d a 3,59 dólares.
Si bien se especulaba que la Cuenca del Noroeste no iba a recibir ninguna oferta -como sucedió en todas las otras rondas de este plan de estímulos- sorprendió el nulo interés por la Cuenca Austral, lo que confirma su mal momento y el freno a su desarrollo gasífero.
Lo relevante es que -teniendo en cuenta el limitante que presenta Vaca Muerta para producir más gas hasta que no se construyan nuevos gasoductos que permitan transportarlo hasta los centros de consumo- la Cuenca Austral emerge como la llave para poder sustituir importaciones a corto plazo.
Por un lado, porque actualmente su gasoducto San Martín opera con una capacidad ociosa muy importante debido a la caída de su producción que se observa desde mediados del 2019 cuando Macri firmó el famoso congelamiento. A su vez, se trata de una de la Cuenca con mayor potencial de desarrollo después de la Neuquina.
El problema, según destacan los especialistas, es que sus particulares características -como ser la producción offshore en su gran mayoría- hacen que tenga un costo más elevado que le impide ser competitiva al precio tope que fijó el gobierno.
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De hecho, ese precio incluso pareció haber quedado corto para la propia Vaca Muerta considerando el salto que estamos viendo en Europa donde llegó a superar los 30 dólares, diez veces el valor ofrecido por el Estado argentino.
Eso explica que las grandes jugadoras del mercado local de gas como YPF, PAE, Total y Wintershall hayan decidido ausentarse de esta ronda tanto en las ofertas de la Cuenca Neuquina como en la Austral.
Para el territorio neuquino, el debate no tiene gran importancia a corto plazo, ya que se alcanzó casi la totalidad del volumen posible de ser contractualizado de aquí al próximo año. En cambio, para la región de Tierra del Fuego y Santa Cruz, significa una oportunidad perdida.
Es un error ponerle límites al precio, porque el precio futuro del GNL va a ser sustancialmente mayor al de este año”, dijo el consultor Daniel Gerold, en ese sentido, en el último evento de AmCham y el IAPG.
